Mala Alai CAPITULO 16

Novela Laliter
Mala Alai
Capítulo 16



Peter: -Alai...lo que pasó, ya pasó- ¿Qué carajos significaba eso?- O mejor dicho no pasó- ¿Trabalenguas?
Alai: -Todo lo que pasó obviamente pasó- rodé mis ojos.
Peter: -Pero debemos ignorar que pasó- Entiendo, se refería a nuestro beso.
Alai: -¿Por qué lo hizo?- lo miré directo a los ojos, aquel tipo parecía tener una guerra mental en la que no me permitía entrar. Suspiró y miró hacia el piso.
Peter: -Necesitaba controlarte. Eres una niña para mí- me miró serio. Al parecer la guerra había cesado. Un nudo se plantó en mi garganta, yo tragaba con dificultad queriendo deshacerlo pero todo era demasiado.
Alai: -¿Por qué me trajo aquí?
Peter: -Te lo dije, Alai. Voy a cuidarte.
Alai: -¿Qué hay de Noah?
Peter: -Las niñas necesitan más cuido- hizo énfasis en 'niña' lo cual me hizo sentir un pañal puesto y un babero que decía 'La bebé de la casa'. Es más decir que me sentí una perdedora tratando de seducirme al rey de Inglaterra.
Alai: -Las niñas- asentí- Si eso es todo, pido que me lleve al internado- me levanté, no podía esconderlo, estaba realmente molesta ¿Quién era él apra hacerme sentir cosas? ¿Para esta m%$da me porté bien todo este tiempo? Muy equivocado, Peter.
Peter: -¿Estás molesta?- me lanzó una sonrisa burlona. De esas que hacen los tíos cuando la bebé hace un puchero porque no encuentra el chupete que trae colgando del cuello. Maldita sea, cada segundo que pasa me siento un año menos de edad y él crece mentalmente. Debo cambiar mi técnica.
Alai: -No le doy importancia a lo que no la merece, sólo que necesito ir al internado, si no lo recuerda debo velar a mi padre- Si, eso sonó más maduro.
Peter: -Comprendo, pero son las cuatro de la tarde y el velorio comienza de noche.
Alai: -Mi abuelo y mi hermano tambien están de luto y no me parece apropiado dejarlos solos en este momento- ¡En tu cara, Bedoya Agüero! ¡Tengo más edad!
Peter: -¿Es por eso que te quieres ir realmente?- se levantó y se acercó, ¡Sh%t!
Alai: -¿Va a tenerme aquí sin mi consentimiendo?- ¿17? Mis palabras me agregan por lo menos diez años, pero mis pensamientos me hacen regresar a los cinco, pero él no se da cuenta.
Peter: -¿Ya decidiste que carrera estudiarás?
Alai: -Estudiaré lo que siempre mi madre quiso, criminología- Peter rió a carcajadas.
Peter: -¿Criminología? Irónico- hizo una cara divertida. Definitivamente cambiamos de lugar, pues yo me sentía diez años mayor que él y no parecía importarle.
Alai: -Pensé que la beca era de algo en específico.
Perer: -Tu padre eligió Sociología antropológica.
Alai: -Puedo estudiar ambas ¿Hay una carrera que las abarque a las dos, no?- él asintió- Que buen director- dije sarcástica y me dirige a la puerta.
Peter: -Permítame- me abrió la puerta. Wooow, su edad mental ya se había elevado. Tiré mi cabeza hacia un lado y caminé fuera del apartamento. Bajamos y entramos al auto- ¿Tienes hambre?- dijo serio, sí, mínimo tiene cinco años mentales más que yo. Yo negué con la cabeza- Iremos a recargar el tanque a una gasolinera, Londres está a tres horas y media, necesito que te refresques y vayas al baño, te compraré una botella de agua por si te da sed y algo de comer- Ah, si. Y no se te olvide comprarme toallistas húmedas para limpiarme la boca porque de seguro me embarraré toda la cara de comida, y una cd de música clásica de esos para mejorar el desarrollo del cerebro del bebé, gracias. Me sentía una completa recién nacida.
Llegamos a una gasolinera en tan sólo quince minutos, estaba de camino en la carretera. Me bajé y di un tirón a la puerta. Este día no podía ser real, Petrr se bajó.
Peter: -No te alejes mucho- ¡Ya basta! Rodé mis ojos.
Me acerqué al baño de la gasolinera y entré, había un espejo dentro, estaba volviéndome loca (más de la que ya estaba)
Alai: -A ver, Alai. Vamos a hablar tú y yo- hablando sóla, si ¿Algún problema? me decía a mi misma en mis adentros, nisiquiera yo misma me trataba con respeto- Tu padre ya no está, vas a velarlo en tres horas y media. Tu madre está en coma y posiblemente quede en estado vegetal- Mi pecho se hinchó, puse los codos en el pequeño lavabo y agaché mi cabeza, cerré mis ojos....
*****RECUERDO*****
''¡¡Tú ya no eres nadie para decirme que hacer!! Ojalá te mueras, el día más feliz de mi vida será cuando tu maldito corazón deje de palpitar. Daré brincos sobre tu maldita tumba, enterrarte será el mejor de los regalos que puedo tener. ¡¡¡Cuanto quisiera verte muerto, maldito Peter Lanzani!!'' ''.....Ojalá te mueras....'' ''....Ojalá te mueras...'' ''Ojalá te mueras....'' (Resonancia)
************************
Salí del recuerdo casi ahogándome, me miré en el espejo estaba llorando sin control, lo único que miraba era el reflejo de una sicópata recordando sus momentos de locura extrema.
Alai: -¡Si, Lanzani! ¡Te moriste! ¡Me dejaste!- gritaba al espejo- ¡Me abandonaste! ¡Pase toda una vida diciéndote que dejaras de j$de%me la mía y no hacías caso! ¡Pero te digo que te mueras y eso si obedeciste! ¡¡No he dejado de odiarte!! ¡Ahora te odio más porque me abandonaste!- Golpeé el espejo con mis puños y mis muñecas y este se quebró en mil pedazos, mis brazos comenzaron a sangrar, hice mucho ruido y la puerta comenzó a sonar.
Peter: -¡Alai! ¿Estás bien? ¡Ábreme!- forzajeaba el cerrojo. Yo caí en llanto al suelo y ensangrentada tomándome del pelo.
Alai: -Te odio Peter Lanzani, jamás te voy a perdonar que me hayas dejado, dejaste a Noah y a mi mamá, ella que dio tanto por ti la abandonaste una vez más. Ojalá revivieras para matarte yo misma, me daría más gusto verte muerto por mi mano que por el maldito accidente- susurraba entre sollozos. Estaba devastada y la única forma de afrontarlo era con rencor, sentía que lo que quedaba de mi corazón se consumía en la llama del odio.
Peter: -¡Alai! ¡Ábreme!
Alai: -¡Lárgate!- la puerta se abrió, la cerradura cayó al suelo, lo único que vi fueron las zapatillas cafés de Peter limpias y brillantes frente a mis converse sucios con aquel vómito seco de una de las veces que había tenido una borrachera, se miraba el contraste de personalidades a travez de nuestro calzado.
Peter: -¡Por Dios! Quebraste el espejo- tomó papel sanitario y envolvió mis muñecas- Salgamos de aquí- me haló del brazo hacia afuera. Me sentó sobre la cajuela del auto; como si no me sintiera tan pequeña ya- Disculpe- le dijo a uno de los que atendían el mini super que había- ¿Venden alcohol?
Alai: -¿Va a emborracharme?
Peter: -Alcohol farmacéutico- concordó viéndome como 'no digas pendejadas'
Tipo: -Si, pero no tenemos camisas de fuerzas- se burló de mi.
Alai: -Sabes que tengo yo para ti- me levanté mirándolo acechante, el chico peló los ojos.
Peter -Alai- me detuvo- Voy por algunas vendas, si yo hallo a este hombre desangrado, asfixiado o ahogado cuando regrese estarás en problemas- me amenazó con el dedo. Ok, me quito tantos años de madurez con eso que hasta me sentía un esperma. Peter entró a la minitienda y el tipo de la entrada me miraba asustado, noté que su mirada se dirigía a mis puños ensangrentados.
Alai: -¿Qué miras?
Tipo: -Nada.
Alak: -¿Mis manos?- alcé mis manos, él negó con la cabeza.
Tipo: -¿Tú te lo hiciste sola?- era un chico blanco, pelirrojo, con más pecas que neuronas.
Alai: -Sí- sonreí como una desquiciada para infundirle miedo- Me encanta ver como la sangre corre- embarré mis mejillas con sangre, el chico me miraba espantado- ¿Lindo, no?
Tipo: -Estás loca, chica?
Alai: -¿Qué dijiste?- me bajé de la cajuela y me acerqué a él de a poco, sacudí mi cabeza como loca y abrí mis ojos exageradamente para aterrar a aquel inepto. Además tenía el ojo ligeramente morado por el accidente aparte del enorme moretón de mi frente cuando me golpeé con el asiento de enfrente tambien.
Tipo: -A-a-aléjate o grito.
Alai: -Es tan hermoso cuando gritan- me acercaba lentamente- lo hacen más interesante. Los gritos de espanto son como...orgasmos de asesinato- estaba casi frente a él.
Tipo: -¡¡Auxilio!!- gritó, Peter corrió hacia afuera, yo me senté en la cajuela de nuevo.
Peter: -¿Qué pasa?- traía una bolsa
Tipo: -¡Esa chica está loca!- temblaba.
Peter: -Lo sé- suspiró. Yo sólo permanecía con mis dedos en las mejillas jugando como inocente. Peter se acercó- Dame acá- me tomó un brazo, sacó una pinza.
Alai: -Eso es para cejas- Peter me miró sin paciencia alguna con su cara de 'Eres tan burra'
Peter: -No me digas- dijo sarcástico, estaba confirmado que estaba molesto por mi intento suicida. Limpió generalmente la sangre y con la pinza se deshizo cuidadosamente de los pequeños pedacitos de vidrio que tenía, limpió con alcohol que me ardió hasta la ingle.
Alai: -Me arde.
Peter: -Que mal- dijo indiferente mientras enrrollaba mis muñecas con las vendas- Esperemos que no necesites puntos.
Alai: -¿A qué hora nos vamos?
Peter: -Rápido antes que se den cuenta de lo que hiciste- me bajé de la cajuela y entramos al auto. Peter lo puso en marcha- Compré refresco, agua, algunas galletas y papas.
Alai: -¿Usaste todo el alcohol?- Peter presionó la mandíbula y aceleró.
Peter: -¿Beberías alcohol etílico?- me miró con una cara nueva, esta se llamaba '¿Tan enferma estás?'
Alai: -No- dije molesta, andaba furioso por lo que hice, pero es mi cuerpo, mis malditos puños y hago lo que quiera con ellos.
Peter: -Son las casi las cinco, llegaremos a Londres contra las nueve, si tienes sueño puedes irte al asiento trasero, recuerda que tuviste un accidente.
 Alai: -Mi accidente fue conocerte- susurré.
Peter: -¿Dijiste algo?
Alai: -Nada. Un punto más de locura, yo hablando sola.
Peter: -No me interesan tus puntos o razones para volverte loca, mi único deber es cuidarte de tus locuras no entenderlas- Esa fue una bofetada emocional. De a dos es este juego, indiferencia se paga con indiferencia.
Alai: -Me voy atrás- me pasé al asiento de atrás. Hurgué cada rincón buscando algo con que fastidiarlo, peor sólo encontre una botella de agua vacía y un inhalador de asma, tambien vacío- Asmático- lancé el inhalador contra el parabrisas.
Peter: -Es de uno de mis sobrinos- claro, los retardados; el punto débil de Liz.
Alai: -¿Cómo son?
Peter: -Mi relación contigo es profesional- dijo cortante.
Alai: -Profesionalmente en el asfalto- me lancé boca arriba sobre el asiento trasero.
Peter: -¿No vas a olvidarlo, cierto?
Alai: -Uso los puntos a mi favor cuando es necesario.
Peter: -En eso te pareces a tu madre.
Alai: -Soy idéntica a mi madre, todo el mundo lo dice, aunque hay quiénes dicen que soy peor.
Peter: -Me alegra que te enorgullezca.
Alai: -Lo único que me diferencia de ella es que no me voy a enamorar de mi...-Irónico, no pensé lo que estaba diciendo pero, me estaba pasando casi lo mismo.
Peter: -¿De quién? Dilo, de tu cuidador.
Alai: -Mi padre sólo era meses mayor que mi madre. Además ella tenía 16 así que ya pasé la edad de fuego.
Peter: -Y yo soy un hombre siete años mayor, con un cargo responsable de toda una organización de estudiantes y gente importante ¿Cómo fui a caer como niñero?
Alai: -¡Lo mismo me pregunto yo! ¡No quiero estar con alguien a quien le pese mi presencia!- me crucé de brazos.
Peter: -No me pesa tu presencia, me pesa tu actitud.
Alai: -¿Puede hacer silencio? Quiero dormir- no respondió. Cerré mis ojos y me comenzó a doler un poco la cabeza, aparte que me ardían las muñecas. Cuando desperté seguía conduciendo- ¿Cuánto dormí?
Peter: -Casi dos horas- sentí el frío de la carretera.
Alai: -¿Puede cerrar las ventanas? Tengo frío.
Peter: -¿Ahora pides permiso?- dijo seco.
Alai: -¡Ya estuvo bueno! ¿Cuál es su tema conmigo? ¿Va a estar así todo el camino? Dígame y no vuelvo a hablarle en lo que resta de la carretera.
Peter: -¿Sabes que el que me molesta? Que hace dos horas estabas gritándome '¡Peter eres un imbécil!' y ahora estás diciéndome '¿Va a estar así todo el camino?' No comprendo tus cambios de personalidad. Tu respeto hacia mi es bipolar.
Alai: -Mira quien habla; 'Te quiero como mi hermanita pero te besaré' y luego 'Todo fue un error y ahora te odio por desquitarte de tu horrenda vida con el espejo de una gasolinera' Creo que la demencia está de ambos polos.
Peter: -Sólo quedate callada- se cerró.
Alai: -Ahh claro, cuando las pruebas están de su lado venga vamos a discutir, pero cuando yo tengo la razón y la ves difícil sólo debo quedarme callada y ya está.
Peter: -Oye niña, debes respetarme. tengo 24 años y estoy a cargo tuyo.
Alai: -Me va a disculpar director Bedoya pero usted no esta a cargo mío sino hasta dentro de una semana, mientras puedo hacer mi voluntad.
Peter: -Mientras seas menor de edad no puedes hacer tu voluntad.
Alai: -Sólo me faltan seis meses para los 18.
Peter: -Jane, no quiero tener problemas contigo- Desconocía por completo este Peter.
Alai: -¿Sabe qué? Tiene toda la razón, quiere una mera relación de trabajo, eso tendrá- me miró por el retrovisor, yo alcé una ceja, él suavizó su mirada, me confundió por completo. Pero segundos despues entendía lo que quería hacer, y lo estaba logrando; quería fastidiarme. Portarse serio cuando yo me mostraba interesada, que yo me enojara y cambiar de puestos, así me confundiría y me haría sentir una idiota. Me recosté en el asiento y una hora despues llegamos a Londres.
Peter: -Iremos a una tienda porque andas desastroza y con una camisa verde no creo que seas bien vista en una vela.
Alai: -Como sea- rodé mis ojos.
Llegamos a una tienda y entramos. Mi mamá me contó esta história, si la cajera babeaba por Peter me daría un susto espeluznante, no podía estarme pasando lo mismo que mi madre. Exhalé aliviada al darme cuenta que era un hombre quien vigilaba la caja.
XxX: -¡Buenas noches!- di un salto del susto al escuchar esa voz chillona tras de mí, la miré, una rubia teñida con raíces negras de cinco centímetros.
Alai: -¿Qué quieres, bicho?
XxX: -Soy Natasha ¿Puedo ayudarle en algo?
Alai: -Natasha- asentí- Puedes hacerme un favor enorme, mira...Hay una empleada fastidiosa con voz de Alvin y las Ardillas jodiéndome en este momento ¿Te deshaces de ella?- sonreí. La chica borró su sonrisa.
Peter: -Discúlpela, no ha tenido un buen día.
Natasha: -Se nota, es que la vi tan desaliñada que pensé que quería robarse algo- Peter abrió sus ojos y me miró esperando a que le clavara un cuchillo a Natasha.
Alai: -Ahhh...ya entendí. Un gusto Natasha mi nombre es Alai Lanzani- hice énfasis en Lanzani, la chica me reconoció inmediatamente.
Natasha: -Oh, eres la que sale en las noticias incendiando lugares a diario, me di cuenta lo de tu padre, lo siento mucho.
Alai: -Si si, ahora desaparece o le prendo fuego a los tres pelos que tienes allá abajo ¿Si?
Peter: -Buscamos un vestido negro decente, que esconda el poco respeto que tiene Alai por el luto, o al menos que lo intente.
Natasha: -Por aquí, hermoso- le sonrió. Mil mi%$das.
Natasha le mostró nos mostró este vestido


Peter: -¿Qué parte de 'luto' no entendió?- dijo sosteniendo su cabeza.
Alai: -Lárgate, inútil, lo haré yo misma- la empujé y tomé un conjunto,sali asi

 -¿Qué dice su excelencia? ¿Me veo bien así?- Peter me miraba de pies a cabeza boquiabierto.
Peter: -Sí, está bien- le extendió una tarjeta de crédito a Natasha.
Alai: -Usted tampoco debería llegar de jeans y camiseta.
Natasha: -Tenemos buenos trajes.
Alai: -Adelante- le hice una reverencia en burla. Peter me retorció los ojos y caminó. Salió del probador. Natasha, suma a la cuenta un trapeador y ven a secar mi baba.
Natasha: -Le queda estupendo- decía acomodando su corbata.
Alai: -Si muy bien, apártate que lo vas a ahorcar- la empujé y aflojé la corbata de Peter.
Salimos en dirección al internado, cuando llegamos estaba lleno de cuervos, todos de negro, y un montón de chicas, las internas obviamente y mi familia, muchos llorando. Se me acercaron varias personas y me dieron el pésame. Muchos lloraban, murmuraban, yo permanecía sentada en las escaleras enredando mi dedo en un hilo desprendido del ruedo de mi vestido. Daniela se me acercó.
Daniela: -¿Qué haces aquí?
Alai: -Sentada ¿No ves? ¿Por qué no estás chacoviándote a Noh?
Daniela: -¿No te duele perderlo, cierto?
Alai: -¿Y el punto es venir a recordarme que mi padre se murió?
Daniela: -Sólo vengo a darte apoyo.
Alai: -No lo necesito- me levanté y subí las escaleras. Entré a la puerta donde mi madre dormía en sus días interna. Tres camas; Rochi , Euge,  y Lali. Sonreí como tonta, me senté en la cama donde dormía mi madre. La puerta se abrió y una chica entró.
XxX: -Disculpa, pensé que no había nadie.
Alai: -¿Qué quieres?
XxX: -Soy Winter- me sonrió.
Alai: -¿Y?
Winter: -Lamento lo de tu padre y...lo de tu madre tambien.
Alai: -¿Tú duermes en esta cama?- Winter asintió- ¿Por qué estás aquí?
Winter: -Quiero estar sola- se encogió de hombros.
Alai: -Tambien yo.
Winter: -Lo siento- abrió la puerta. http://www.youtube.com/watch?v=QfeOiEJklAk (Escúchenla)
Alai: -No- la detuve- me voy yo- salí y miré al fondo del pasillo, aquella habitación de la puerta caoba, la del cuidador hijo de la directora de aquél tiempo, suspiré y mis ojos se llenaron de lágriman, tomé todas mis fuerzas y caminé hasta allá, abrí la puerta y entré, ya había venido aquí muchas veces cuando visitaba al abuelo, mi padre siempre se quedaba aqui con mi mamá. Rocé su cama con mis dedos y las lágrimas cayeron instantáneamente- Aquí fue donde te acostaste con la verdurera frente a mi madre- miré hacia lso aldos buscando la silla en la que ató a mi madre, estaba en una esquina, me acerqué a ella y me senté visualizando hacia la cama.
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Alai: -Cuéntame.
Lali: -Jane, sólo fue un error, ya lo he perdonado.
Alai: -Mamá, yo te cuento todas mis cosas.
Lali: -No juzgues a tu padre por esto.
Alai: -¡Que no! Él siempre será mi padre, eran muy jóvenen, anda cuéntame.
Lali: -Peter tomó la sábana y me amarró las manos y los pies a la silla, tambien me puso una mordaza para no poder hablar.
Lanzó a la cama a Paula, y comenzó a besarla enfrente de mis ojos. Le quitaba toda la ropa y ella a él, ambos quedaron completamente desnudos. Yo empuñaba mis ojos, trataba de soltarme pero era imposible, más bien me lastimaba a mi misma. Ellos se tocaban con desesperación, se notaba el coraje y el resentimiento de Peter. Moría ver como la acariciaba con pasión, ver su piel junto a la de ella. Se comían el uno al otro. Él mordía cada parte de su cuerpo, ella lo besaba y me miraba de vez en cuando para burlarse de mí con su risa. Peter besaba su cuerpo, lamía sus pechos y las lágrimas se derramaban de mis ojos, brotaban sin control, gritaba pero apenas se escuchaba por la mordaza. Estaba a punto de desmayarme. Él comenzó a penetrarla con fuerza, ella gritaba de placer, yo no podía más ver eso, empuñaba mis ojos para no ver pero aún así escuchaba sus gemidos y esos ruidos que producían sus cuerpos al unirse. Yo gritaba del llanto, estaba muriendo por dentro. No sé cuanto tiempo pasó, yo sólo mantenía mis ojos cerrados y lloraba como una loca. Ahora ya no me imaginaría como sería que Paula y Peter lo hubieran hecho, ya lo tenía visto. Al fin se callaron y acabaron. Peter se levantó junto con Paula, ambos se vistieron, yo moría en llanto.
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Mientras recordaba las palabras de mi madre visualizaba a mi padre revolcarse con la p%rra esa que me secuestró. Mi corazón se retorcía. Cuanto te odio Lanzani, cuanto me duele que me hayas dejado. No sé que odio más, que ya no estés aquí o que extrañe que estés aquí. La puerta se abrió.
Noah: -Estás aquí- se acercó.
Alai: -Sí- susurré. Noah miró la dirección en la que miraba y entendió todo.
Noah: -No revivas un momento que no viviste.
Alai: -A veces me siento como ella, me siento como si fuera ella, como si todo lo que le pasó a ella me pasó a mí.
Noah: -Mira cuantas locuras cometemos a nuestra edad, eso fue lo único que hicieron, no fueron perfectos.
Alai: -No creo en el arrepentimiento- dije seria.
Noah: -Yo si- se acercó y tomó mi mano- incluso ella, la niña mal creyó en el arrepentimiento y en el amor y cambió.
Alai: -Y mira como le fue- dirigí mis ojos hacia él.
Noah: -Le fue mejor de lo que le pudo haber ido- me haló de la mano y me levantó, nos recostamos en la cama, él se posó detrás de mí y me abrazó- Sin él no estaríamos vivos.
Alai: -Es el punto.
Noah: -¿Por qué estás tan en contra de tu propia vida?
Alai: -¿De qué hablas?
Noah: -Dinero, amigos, belleza, estudios, familia ¿Qué te faltaba?
Alai: -La ausencia de todos ellos.
Noah: -Buena observación- me dio un beso en la mejilla. Yo me volteé hacia él.
Alai: -Quiero que estés conmigo todo el tiempo.
Noah: -Estoy contigo todo el tiempo.
Alai: -Estás con Daniela todo el tiempo- nos miramos a los ojos.
Noah: -Nana, tú eres mi hermana gemela, soy parte de tí, no seas celosa- me abrazó y me aferró a su cuerpo.
Alai: -Te amo.
Noah: -Yo tambien te amo- sonreímos.
Alai: -No quiero que quieras más a Daniela que a mí.
Noah: -Créeme que no es así.
Alai: -¿Me haces un favor?
Noah: -Claro.
Alai: -Me acabo de comprar unas bragas y olvidé quitarle la etiqueta y se me metió dentro del trasero- Ed soltó una carcajada- ¡Es enserio!- reí.
Noah: -¿Qué quieres que haga?
Alai: -Creo que hay unas tijeras en la gaveta de ahí- señalé- córtala.
Noah: -A ver...-abrió la gaveta y sacó la tijera. Yo me puse sobre mis rodillas y mis manos en la cama, Noah se posó sobre sus rodillas detrás de mí y me levantó la falda del vestido y haló la cinta de la etiqueta.
Alai: -¡Apúrate que me da cosa estar de c%lo hacia tí! Pareciera que me estás dando- ambos reímos.
Noah: -Estás malditas tijeras no tienen nada de filo, son para pre escolar- la puerta se abrió.
Alai: -¡¡¡Pues dále más duro!!!- Quedamos atónitos al ver muchos flashes de cámaras y gente murmurando ¡La habitación se inundó de pediodistas!
Director Lanzani: -¡¡Pero qué es esto!!
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D: Sin comentarios

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Mika💞